El secretario general de CCOO ha acusado al Ejecutivo de aplicar un programa distinto al que se presentó en las elecciones, de manera que está provocando un "estado de emergencia económico y social". Según explicó Toxo en la rueda de prensa en la que CCOO, UGT y la Plataforma en Defensa del Estado de Bienestar han presentado las manifestaciones del 29 de abril y del 1º de mayo, con estas movilizaciones "queremos mandar un mensaje nítido y potente de oposición y de que hay alternativas a esas políticas".
El secretario general de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, ha alertado de que con la aplicación de ese programa oculto "se quiere transformar el modelo social" para convertir en negocio privado los servicios públicos, mediante la retirada progresiva del Estado". Y, añadió, que esto se hace "desde la prepotencia de la mayoría absoluta y el desprecio al diálogo".
La urgencia y la gravedad de la situación justifican la convocatoria de las manifestaciones convocadas en todo el país para el domingo 29 de abril, todo ello "sin renunciar", precisó Toxo, "a las tradicionales manifestaciones del Primero de Mayo".
Toxo ha hecho estas declaraciones en la rueda de prensa en la que ha comparecido junto a Cándido Méndez, secretario general de UGT, Marciano Sánchez-Bayle y Rosa Escapa, representantes de la Plataforma en Defensa del Estado de Bienestar y los Servicios Públicos para presentar las manifestaciones del 29 de abril contra los recortes sociales aprobados por el Gobierno, especialmente los que afectan a la educación y la sanidad. Movilizaciones que, según subrayó, "durarán tanto como sea necesario", es decir, "el tiempo que determine el Gobierno con su actuación".
Para Toxo, que exigió al Gobierno de Rajoy menos frivolidad y más compromiso con las necesidades de las personas, la sociedad tiene el legítimo derecho a defenderse de unas políticas que están creando alarma y una situación de "estado de emergencia económico y social", de las que destacó la reforma laboral "tremendamente lesiva", unos Presupuestos Generales del Estado, "que el propio Gobierno reconoce que van a profundizar la recesión", y el anuncio de un nuevo ajuste de 10.000 millones de euros en educación y sanidad.
Por su parte, Cándido Méndez, afirmó que la manifestación del 29 de abril es una convocatoria más allá de lo laboral y destacó la vuelta atrás que supondrán las medidas tomadas por el gobierno central respecto al bienestar social. "Las diferentes medidas en materia de sanidad y educación suponen una "imposición de duras políticas de recorte", señaló, para afirmar que "no lo van a conseguir".
Por otro lado, Marciano Sánchez-Bayle, portavoz de la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública, mostró su rechazo de la política del gobierno ya que "no cumple con su programa electoral". Por otro lado, declaró la injusticia que suponen las medias del gobierno, sobre todo en materia de sanidad. El Gobierno "actúa con cobardía, y sólo estamos viendo los primeros pasos en la senda de los recortes", concluyó.
Imprimir artículo